El largo aliento de Hilary Duff

Desde que inició su carrera en Disney, Hilary Duff ha logrado sobresalir en la industria
del entretenimiento como actriz y cantante. Luego de una pausa de ocho años en su carrera,
regresa completamente renovada.

Es fácil sentirse viejo al enterarse de que Hilary Duff, la risueña adolescente que interpretó a Lizzie McGuire y jugó "20 preguntas" para conocer al príncipe en La Nueva Cenicienta, se acerca a los 30 años con hijo y matrimonio a bordo. Una de las primeras reinas de Disney y una de las pocas (tal vez la única) que brilló más por su talento que por sus escándalos. Nos enamoró con sus actuaciones de niña buena e incluso nos convenció de escucharla cantando, pero al igual que nuestra infancia, un día simplemente notamos que desapareció sin previo aviso.

Ocho años han pasado desde que escuchamos su último disco y luego de varias amenazas incumplidas, por fin, Hilary Duff nos revela su quinto trabajo discográfico Breathe In. Breathe Out. Una evolución del sonido electrónico que la hizo popular con Dignity, que se fusiona con algunos ritmos country para traernos una renovada faceta de la Srta. Duff. Un disco que desde la primera vez que se escucha nos hace recordar por qué extrañábamos la dulce voz de su intérprete y la facilidad de ésta para transitar de un ritmo a otro y (casi siempre) salir bien librada en el proceso.

Pop, Rock y Electrónica son los sonidos predominantes en la discografía de Hilary Duff.
Canciones como Wake Up, Fly, Come Clean y Stranger lograron conquistar a la audiencia joven
de principios de la década de los 2000

Desde el pop infantil con el que debutó en What Dreams Are Made Of hasta la chica mala que intentó vendernos en Reach Out, Hilary siempre ha buscado nuevas formas de cautivar a su público. Aunque ciertamente su encanto radica en su angelical sonrisa y su carita de niña buena. Por ello, luego de coquetear con el pop-rock en varias de sus canciones (algunas mejores que otras), para su regreso se decidió por el otro extremo del pop norteamericano y optó por un estilo más country. Anunciando su reaparición en la escena musical, nuevo álbum y nueva era, con su primera canción en años: Chasing The Sun. Un fracaso total.

Demasiada expectativa para una canción genérica y sin fuerza que no convenció a la crítica y desilusionó a los fans. Entonces All About You llegó al rescate, canción que transitaba el mismo sendero que su antecesora, pero un poco mejor lograda. Lastimosamente ni una ni otra lograron calar en los charts y más tardaron en ser publicadas que en ser olvidadas por el público. Debido a esto, Hilary y su equipo se encerraron en el estudio con la ayuda de Tove Lo, Ed Sheeran y el dúo de productores maravilla Bloodshy & Avant, para dar un giro de 180° a la dirección del álbum por algo más electrónico y movido. Cosa que agradecemos infinitamente.

Así pues, con un año de retraso, nuevos ritmos y nuevo color de pelo, llegó Sparks. Una canción bailable, de ritmo fresco y unos silbidos de fondo, que atrapa desde la primera vez. Un sencillo con madera de hit de verano que falló al entrar en las listas, seguramente por la demora en el lanzamiento del video o el pseudo documental-comercial que terminó siendo. Sin embargo, la carta de presentación que todos estábamos esperando para el regreso de Hilary Duff. Una melodía electro-pop pegajosa y alegre que nos recuerda a la Hilary de antaño pero con mayor dominio de su voz y una mejor producción.

Ante la inconformidad de sus fans por la primera versión del video de Sparks

(Debido al exceso de publicidad y las entrevistas sobre la pista),
Hilary decidió sacar una nueva versión inspirada en los videos de K-pop.

Seguramente nunca oiremos las canciones folk que grabó originalmente Hilary para su quinto disco, pero agradecemos que se haya tomado el tiempo de reinventarlo. Porque escuchar el resultado final es una experiencia más que placentera. Básicamente dividido en dos partes: la electro party que va desde Sparks hasta Arms Around a Memory, seguida de una breve transición con Stay In Love. Y otra más personal/country que inicia con Brave Heart y cierra majestuosamente con Night Like This. Aunque las canciones incluidas en la versión deluxe, Belong y Rebel Hearts, también merecen ser escuchadas; incluso se perdona que la última sea un plagio descarado de Avicii, porque la voz de Hilary le da un toque más suave y refrescante.

Un álbum pulido y bien logrado. Eso es Breathe In. Breathe Out. No en vano logró posicionarse como el N° 1 de iTunes en EE. UU. a pocas horas de su lanzamiento. Un trabajo que seguramente logrará arrebatarle a Dignity el título de "El mejor álbum de Hilary Duff", puesto que su evolución artística es innegable. Un deleite para ir de fiesta o dar una vuelta por la carretera, con un sin fin de material para (de una vez) posicionarse en las listas de lo mejor de la música pop este año. Puede que nos haya quitado el aliento durante ocho años, pero no queda duda de que amamos el nuevo aire de Hilary Duff.